Estos anuncios “HULU” (lulu=esclavo?¿) muestran de forma descarada y muy graciosa lo evidente, como millones de personas son controladas por entidades metahumanas a través del entretenimiento tecnológico por ejemplo, dependientes de dicho control con una falsa percepción de libertad, siendo así por definición perfectos esclavos y reduciendo nuestro potencial infinito a simple ganado.